“Fue difícil para una mujer y en aquella época tuve muchas propuestas de matrimonio, pero yo me casé con Ñubel. Es feo quedarse sola, no lo aconsejo, pero yo quería ir a la cancha y viajar para ver a Ñubel. Y hace 88 años que voy a la cancha” Amelia Montero, nuestra “Vieja” Amelia
Mujer de dos colores que envuelven tu alma de saltimbanqui por ese eterno amor por nuestro Newell’s.
Mujer del sacrificio, del sufrimiento por partidos complicados que quisieras olvidar y que guardas escondidos en un rincón del corazón, esos recuerdos que nunca dejaran de ser parte de tu verdad en este amor que no miente.
Mujer que con habilidad surrealista enseñaste a tus hijos que fútbol es igual a Newell’s, que la pasión es igual a Newell’s, que el amor se pinta de rojo y negro, que el aliento se invento en el Coloso, y que en casa, solo se habla de Newell’s.
Mujer que tenes la obligación de ser la belleza que nos representa en cada lugar que nos toque estar, sos esa roza que tan solo con un un toque de pasión te convertís en el ser mas primitivo que haya pisado una cancha de fútbol desgarrando en un solo grito ¡Vamos Newell’s!
Mujer que también has sacrificados cumpleaños, fiestas y si hasta cambiaste tu fecha de boda para poder ver en el verde césped al verdadero amor de tu vida, a Newell’s.
Mujer que representas la vida, el amor, la pasión, y que mejor que seas vos para que en este día, tu día, podamos decir sin ninguna oportunidad de equivocarnos que sos el estandarte mas alto de todo lo que significa el ser leproso desde el alma, desde tus entrañas mismas, primer lugar donde sentimos la vida, la pasión y el amor por estos colores, y quien te dice que no fue el lugar donde nuestras primeras palabras fueron ¡Carajo, Newell’s, Carajo!
EL Beto