Siempre la prioridad es el cuidado de la salud y de la vida como valores innegociables para que el ser humano luego pueda desarrollar cualquier actividad. Y está clarísimo que por estos días la cuestión sanitaria ocupa el centro de la atención y los esfuerzos de toda la sociedad para poder contrarrestar el flagelo del coronavirus. En este contexto de incertidumbre y preocupación global, Newell’s afronta nada menos que un año electoral. Porque los socios rojinegros tienen que elegir nuevas autoridades en el mes de diciembre, en una ratificación de que la democracia llegó al club para quedarse definitivamente. Pero ya se puede decir que la pandemia alterará como mínimo el proceso original de los pasos estatutarios que deben cumplirse para desembarcar en los comicios.
Porque será prácticamente imposible que en mayo se realice con normalidad la asamblea para designar a la junta electoral y esto de por sí ya pospondrá el primer paso rumbo a las elecciones.
El proceso electoral debe cumplir con plazos estatutarios para arribar al día de la votación, que en principio será el próximo domingo 13 de diciembre (ver aparte).
La realidad es que la delicada situación sanitaria que atraviesa el país abre un signo de interrogación sobre cómo será la agenda definitiva de los pasos estatutarios rumbo a los comicios leprosos. Porque como primera señal será muy difícil que el mes que viene puedan reunirse los socios rojinegros en la asamblea para definir a los integrantes de la junta electoral, que luego se encargará de llevar adelante la organización de la votación.
Hoy rigen en el país medidas estrictas de aislamiento social y cuarentena obligatoria, que impiden moverse a las personas más allá de los trámites esenciales. Los clubes están cerrados y sin ninguna actividad social. Y se intuye que esta situación preventiva no se modificará en el corto plazo.
Así, lo más probable es que la asamblea de mayo deba postergarse por la pandemia. Y es algo que seguramente la dirigencia leprosa estará evaluando, siempre en contacto con la Inspección General de Personas Jurídicas (IGPJ). Y también el arco opositor tendrá que abordar la situación para buscar una solución consensuada de cara al futuro eleccionario.
Porque todo indica que la asamblea para elegir a la junta electoral deberá realizarse cuando se permita la aglomeración de gente. O que las partes involucradas le encuentren una salida de emergencia al nombramiento de la junta, algo complejo porque necesita del voto de los socios para tener absoluta legitimidad.
Decir que hoy las elecciones en Newell’s corren peligro de realizarse en tiempo y forma es una temeridad, tanto como asegurar que la pandemia no tendrá ninguna incidencia en el derrotero rumbo a las urnas.
Hasta diciembre hay varios meses por delante y si la actividad social empieza a normalizarse paulatinamente, las elecciones no deberían correr peligro de realizarse a fin de año. Lo que sí está bajo la lupa son los pasos previos a la votación.
Un mes clave será septiembre, porque allí se confecciona el padrón electoral. Y otro dato para nada menor es que para poder votar, los socios deben estar con la cuota al día y todo indica que durante la pandemia y lo que dure el parate del fútbol muchos asocios no podrán abonar la cuota por fuerza mayor.
El actual oficialismo en diciembre cumplirá cuatro años y medio de gestión por la anticipación de las elecciones anteriores, en la que el traspaso del mando fue con seis meses de antelación.
Hoy en el país todo transita por el terreno de las conjeturas en cuanto a la vuelta de las actividades sin restricciones. Esto ya marca que el año electoral leproso estará atravesado por la pandemia.
Fuente-ovacion06