Los partidos pasan y la preocupación crece. El puesto de primer marcador central es una de los grandes inconvenientes de Newell’s. Manuel Guanini repareció ayer de titular, ante el desgarro en la fascia plantar de Fabricio Fontanini, con la expectativa de que ante un rival inferior se vaya asentando en el equipo. Pero desaprobó el examen y el alerta continúa más vigente que nunca para Frank Kudelka. Es que no hay muchas más alternativas para esa posición.
Si bien Frank Kudelka manejó la posibilidad de que ayer ingrese Manuel Capasso, la última incorporación leprosa que llegó desde Platense (el pase, de Aldosivi), finalmente jugó Guanini, que desde el comienzo defeccionó. Recién se habían jugado 2 minutos y sujetó con torpeza a Michel García dentro del área rojinegra. El árbitro Pablo Dóvalo lo salvó ignorando el penal.
A los 10’ quedó condicionado al cometerle infracción a Pérez Tarifa y ganarse la tarjeta amarilla, la primera por otra parte del encuentro jugado en el flamante estadio Unico de San Nicolás.
Fue sin dudas un mal comienzo del zaguero, que ante delanteros que tienen más ímpetu que condiciones tuvo serios problemas para estar bien parado y frenarlos.
El alivio para Guanini fue que Sportivo Peñarol se fue resignando muy rápido a solo defenderse y entonces prácticamente no se lo requirió. Lo poco que le tocó hacer, que es salir con pelota al piso, tal cual quiere Kudelka, tampoco lo favoreció. Quedó en evidencia lo que le cuesta. Y arriba en el área contrario tampoco pudo pesar.
Guanini había sido expulsado en la Copa Diego Maradona contra Estudiantes, cumplió la fecha de sanción ante Godoy Cruz (por lo tanto no sufrió el desgaste del viaje) y está para reaparecer el lunes contra Central Córdoba de Santiago del Estero. Pero si lo hace es porque Newell’s tiene solo además a Capasso en condiciones. Por su desempeño, todavía tiene que justificar que merece el puesto.
Fuente-ovacion07