El Club Atlético Newell’s Old Boys recibió un apercibimiento y una sanción económica como consecuencia del hecho sucedido en el último partido jugado de local, frente al Club Atlético Banfield, en el que el juez de línea recibió el impacto de un encendedor lanzado por un simpatizante desde la platea inferior este.
Este lamentable hecho que, afortunadamente, no tuvo consecuencias en la salud del árbitro ni en la continuidad del encuentro, pero la puso en riesgo hasta que se confirmó que el integrante de la terna arbitral no había sufrido lesiones, hoy pasa la factura correspondiente. La Asociación del Fútbol Argentino, a través de su Tribunal de Penas, sancionó a la institución con un apercibimiento y el pago de una multa equivalente a 500 entradas durante tres partidos. Un monto que en su totalidad es comparable al aporte de la cuota mensual de 1000 socios activos, según el valor actual.
Si bien el club viene recuperándose de un pasar financiero difícil, que se está superando y que requiere todavía el esfuerzo de todos los sectores, eventualidades como ésta, producto de la irresponsabilidad de un hincha, son inaceptables. No solo por lo que conllevan desde lo económico sino porque ponen en riesgo el proyecto futbolístico que hoy se está desarrollando con miras a volver a una acomodada posición en la tabla de los promedios.
Hasta el momento de la publicación de esta nota, el club no tiene información sobre la identidad de la persona responsable de la agresión al juez de línea. No obstante, se espera que a través de las cámaras de la dependencia de Seguridad de Competencias Deportivas y Espectáculos Masivos de la provincia de Santa Fe, que estuvieron en ese encuentro, se pueda lograr. Lo que permitiría sancionar al responsable, tanto en lo formal como hacer el correspondiente reclamo económico. El daño al club supera el monto que recibió como multa dado que también puso en riesgo el esfuerzo de toda la organización.
Fuente-CANOB
