Lionel Messi medita su futuro. En España suena con fuerza que estaría fuera de Barcelona, el club que lo elevó al estrellato mundial. Y, ante esto, se sigue hablando de posibles destinos en clubes poderosos desde lo económico.
Ahí, detrás de todos aparece Newell’s, pero desde lo sentimental, con el corazón en la mano. Porque en la carrera económica no participa ni podría hacerlo, sólo piensa en el convencimiento a través del vínculo afectivo. Hoy parecería una utopía pensar a la Pulga poniéndose la rojinegra al menos por unos meses para cumplir con un viejo anhelo, pero en el fútbol nada es imposible por más que lo parezca. ¿O acaso Diego Maradona no se puso la de Newell’s? Ante esto, por más descabellado que parezca, la chance podría existir, aunque sea mínima y “casi imposible”, como sostienen algunos allegados.
La realidad indica que sería impensado verlo a Messi en Argentina, en un fútbol desorganizado y con directivos que no saben hacia dónde ir. La inseguridad, sobre todo en la ciudad, no es un tema menor y está en la mente del jugador. También aparece su familia, en particular sus hijos, esos que están acostumbrados a Barcelona y tienen una vida ordenada, con amigos y sin presiones.
Todas estas cuestiones negativas para un posible regreso contrastan con el deseo y lo que empuja el corazón. La puerta del club del Parque siempre estuvo y permanece abierta. Y hasta existen señales que alientan a una mínima posibilidad de verlo jugar en el Coloso. “A Lionel le diría que venga y trataría de convencerlo. El hincha de Newell’s siempre va a soñar con su regreso, pero son cosas que hay que tomarlas con calma y mucho respeto. Si ocurre será algo impresionante. Como fue en su momento cuando vino Maradona”, declaró tiempo atrás Maximiliano Rodríguez, uno de los emblemas, capitán leproso y que mantiene un vínculo estrecho con la Pulga. Lo que hace pensar que si lo dijo sería por algo.
No sólo la gente piensa en su arribo al Parque, sino que muchos futbolistas también lo hacen. Y vale recordar una situación particular que llevó adelante Nahuel Guzmán. En la firma del contrato con Tigres estableció una cláusula de rescisión si Messi decidía jugar en Newell’s. Un detalle, pero detalle al fin.
Y el vicepresidente Cristian D’Amico declaró hace cuatro años en diálogo con La Capital: “Creo que vamos a darnos el gusto de ver a Messi vistiendo la rojinegra. Algo que sería revolucionario”. Una frase que conserva, aunque pueda sonar más a sueño.
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En los últimos días, después de que se pusiera en duda la continuidad de Lionel en el azulgrana, el exjugador y periodista José Antonio Martín (Petón) se refirió a la situación del jugador en un reconocido programa de España. “Messi tiene dos salidas. Una jugar en el equipo de siempre o volver y ser feliz haciéndose leproso”, disparó.
Messi define su futuro. Sólo él y su familia saben lo que hará. La realidad indica que es difícil verlo fuera de Barcelona, pero desde el entorno nadie se anima a decir un “no” rotundo a la chance leprosa. Sólo un “casi imposible en este momento de su carrera”.
Los sueños, sueños son, pero a veces se hacen realidad. ¿Se producirá en este caso? ¿Lo será en el futuro? El tiempo y la Pulga lo dirán.
Fuente-ovacion02
