El pueblo leproso volvió a la ruta para acompañar a Newell’s jugando de visitante por la Superliga. Es que hacía cuatro años, desde la victoria rojinegra 2 a 0 a Estudiantes en el estadio Ciudad de La Plata del 28 de septiembre de 2015, que los simpatizantes del Parque no estaban habilitados para apoyar al equipo afuera del Coloso. Y ayer, en la nublada tarde de la capital cordobesa, una marea rojinegra copó la tribuna sur del Mario Alberto Kempes, en otra demostración de acompañamiento conmovedora hacia los colores del corazón. Lo negativo es que hubo algunos detenidos en la ruta por el operativo de seguridad.
A los hinchas leprosos les abrieron las puertas para acompañar al equipo fuera de casa y el respaldo fue contundente. Porque desde la mañana una caravana interminable de autos y colectivos tapizaron la autopista Rosario-Córdoba de rojinegro, con el objetivo de bancar al equipo de Frank Kudelka.
Y cerca de las 14, cuando se abrieron las puertas del Kempes, se fue poblando la cabecera sur de hinchas leprosos que ratificaron el amor incondicional a la camiseta del corazón.
A medida que se acercó la hora del partido fue tomando color y algarabía la tribuna leprosa, ante la sorpresa de los locales por el acompañamiento masivo que tuvo Newell’s, en un cotejo que estaba muy lejos de ser una final. El pueblo rojinegro volvió a hacerse sentir de visitante. Cuando tuvo luz verde dijo presente.
Claro que la caravana de hinchas tuvo un estricto control policial y hubo demoras en cada requisa en la ruta, en especial con los micros. Y también detenidos que no pudieron llegar. Tras el partido la alegría no fue total. Y el regreso fue masticando bronca por la derrota.
Fuente-ovacion01