La llegada de Astore cubrió de optimismo los miles de almas que le dieron un si en las ultimas elecciones, luego del nefasto gobierno de Bermudez y Damico.
Sabíamos que lo que dejaron estos delincuentes no sería nada bueno, los primeros análisis dieron cuenta que la cosa no sería fácil.
Hoy a la mitad de la gestión de Astores debo marcar una bipolaridad muy marcada en su gestión, su avance en las obras desarrolladas en Bella Vista, lo planificado para la ampliación en el coloso y todo lo que se refiere a el futbol de Newell’s.
En Bella vista se construyó un vestuario con todas las comodidades para los chicos de reserva, está en marcha la construcción de la nueva residencia para los juveniles, para los chicos que están alojados debajo de la platea este, ya funciona un gimnasio completo para que lo utilicen todos los planteles que trabajen en este predio, se construyeron canchas de césped sintético, se colocaron luces led, se construyeron 24 palcos vip, en bella vista se están pagando las cuotas para ampliar Bella Vista en 8 hectáreas más, ya se pago un 20% del costo total por la construcción de la segunda bandeja del palomar, en las próximas semana dará comienzo la obra.
La otra polaridad de Astore esto lo concerniente al futbol, la falencia de esta dirigencia. Todos sabes las fallas, mala preparación física el año pasado, ventas defectuosas, incorporación de medio pelo, y más allá de todo lo que se hizo mal esta lo que no se realizo (ej. No haber tomado medidas en el caso de la preparación física, no retirar a Heinze cuando correspondía), el fracaso de Heinze, y ahora llega la elección del nuevo técnico, por lo visto es evidente que Astore no sabe nada de futbol, se necesita alguien con la sapiencia suficiente para llevar a buen puerto el futbol de Newell’s.
Newell’s futbol, es pasión, es todo en esta institución, en eso no se puede fallar, tienen dos años por delante, se puede, si están por construir la segunda bandeja una obra pedida por todos, no ahoguen estos logros por la mala gestión en el futbol, el tiempo corre…
EL Beto