Analizando la relatividad de las circunstancias del partido, se pueden rescatar muchas cosas. Fue superado ampliamente en los 90’ por el rival, pero, le dio batalla en todo momento, fundamentalmente en el primer tiempo, donde pudo llegar con jugadas elaboradas y pases en profundidad. Y, en el segundo, la expulsión condicionó todo, los cambios de Gamboa fueron polémicos, tirarse tan atrás fue un error y lo del árbitro fue lo más similar a un sobre entregado.
Newell’s salió de entrada a presionar alto, con 7 jugadores en campo rival, tratando de provocar errores en las salidas. Pero, no es sólo ésto lo importante. Sino que se impuso, y fue efectivo. Estaba al caer alguna llegada y si bien Argentinos cubría bien los espacios, la lepra pudo filtrar un pase por el sector izquierdo para que Garro despliegue una de sus virtudes(su velocidad) y lo terminan cortinando generando una falta. Bittolo ejecuta y Lema cabecea un tanto lejos a las manos del arquero. ¡La lepra avisó a los 4’, entendiendo que podía quebrar a semejante equipo!
El equipo de Gamboa apostaba a su presión alta para “intentar generar un error del rival”. ¡Y, le comenzó a salir! Tal es así que a los 22’ tras una mala salida del Argentinos, la para el Churry en 3/4 de cancha-tirado un poco a la derecha- y habilita de zurda por abajo a Sordo quien queda en offside. ¡Fue una aproximación interesante ya que lo plasmado salía!
Frente a ese equipo corto, “presionando hasta por momentos con 4 jugadores en la zona del balón”, la lepra daba esperanzas y cuando por momentos recibía la pelota generaba más aproximación. A los 25’ le toca dominar a Castro y decidir rápido un pase filtrado. Lo deja solo al Churry para meterse al área pero estaba otra vez en offside. ¡Una verdadera lástima! Ya que fue un estupendo pase donde el jugador queda enganchado, y para colmo Sordo se encontraba sólo. ¡Newells insinuaba con sus delanteros en la línea de la defensa contraria queriendo ganar sus espaldas pero faltaba más finura o que el tiempo pare su ansiedad!
La posesion del balón la tenían ambos(aunque Newell’s la tuvo mucho más los primeros 30’. El rival era un torniquete con su presión aspirando a ganar la tenencia. Nadie se daba por vencido. Estaba todo bastante trabado y costaban las triangulaciones, los pases limpios y hasta las llegadas. El rival recién tuvo la primera y única clara a los 33’. Y, la lepra, si bien tenía aproximaciones, parecían más bien llegadas importantes. Como la que pudo generar a los 38’ cuando se equivoca el arquero-por la presión ejercida- y Castro la pasa para Garro, patea y se la tapa el portero. ¡Newells fue superior!
En el segundo tiempo sólo queda marcar errores. Salvando la actitud que estuvo en todo momento y el offside del final-mal cobrado ya que ante cualquier mención cabe destacar que “el árbitro no sabía el reglamento”-; el cual le pudo permitir el empate a la lepra de la mano de Sabbag.
Los jugadores indudablemente sintieron la expulsión que se da con el Churry. Porque ahí empezó otro partido y la debacle anímica se hizo uña y barro y comenzó el motín por miedo a perder. ¡Aunque, no estaban 100% entregados!
¡Ojo! Las excusas pueden hacer tropezar los análisis. Pero, cabe resaltar que ni Sforza, ni Cacciabue, pudieron sostener la presión y pisar fuerte en el medio. Perdieron muchísimas veces las marcas y retrocedían muchas veces mal. A la expulsión encima se le sumaba esto. Que era fundamental para jugar con un jugador menos.
Argentinos llegó como quiso. Tuvo varias llegadas al arco. Ganó casi siempre la pelota parada(de ahí vino a los 42’ el gol del rival) y se adueñó de la pelota todo el partido. Ni siquiera los cambios de Gamboa pudieron frenarlo.
Newell’s quiso aguantarlo con un 4-4-1 y por momentos ponía 5 jugadores en defensa. Cuesta resaltar algo bueno del segundo tiempo. Salvo la actitud. Pero, Newell’s no hizo pie ni en la tenencia, ni en las marcas, ni en la pelota parada, y para colmo Milito-claro que con ventaja por tener un jugador más-le ganó la pulseada táctica a Gamboa.
La lepra perdió pero con muchísima dignidad. No como la era anterior. Ahora tiene mucho que trabajar de cara al próximo encuentro.
Imanol Gallego Fosco