“La mediocridad es lo excelente para los mediocres” Joseph Joubert” (1754-1824) Ensayista y moralista francés.
En el mensaje por el año de gestión de nuestro presidente Ignasio Astore no se escucharon las palabras “equivocación”, “errores”, donde todos los fracasos de gestión se minimizaron, como el tema de los lesionados que a mi entender fue gravísimo, no dio ninguna explicación, y con consecuencias que hasta el día de hoy lo estamos sufriendo.
Fuimos el equipo de la Argentina con la mayor cantidad de lesiones musculares, pero se contó como una anécdota al pasar, pero si es algo que tenemos los hinchas de Newell’s es memoria.
Cuando comenzó la cascada de lesionados el DT de turno se vio obligado a recurrir a jugadores de divisiones inferiores, rompiendo el orden de acciones sobre el desarrollo de los jugadores de divisiones inferiores ocasionando:
- Se aceleraron los tiempos de formación de dichos jugadores.
- No se cumplieron los tiempos de “maduración formativa”
- Se pueden ver jugadores donde su desempeño es mas fructífero de visitante que de local, donde frente a nuestro publico las cosas cuestan más.
- Actualmente se aceleran los tiempos de recuperación, como se ve actualmente, provocando nuevas recaídas ligamentarías.
- Con tantas lesiones se alteran negativamente los trabajos físicos como queda demostrado en los segundos tiempos de cada partido.
Todo esto fue en desmedro de nuestra actual performance futbolística.
Hoy en un futbol mediocre se podría haber luchado un torneo mediocre, ya se que esto es contrafáctico pero sin errores de gestión todo hubiera sido más fácil, pero todavía estamos esperando un DT, un manager, pero le cambiamos la red a la cancha de futbol 5 del Coloso y seguimos soñando con la segunda bandeja.
El orden de prioridades esta gravemente alterado, primero pensemos en BUEN director técnico, un mejor manager, un preparador físico y cuerpo médico de primera y buenos refuerzos, no incorporaciones.
Todavía esta a tiempo Astore de cambiar su historia, para eso lo invito a pensar en grande y recuerde, Newell’s, Newell’s es grande…
EL Beto