El último registro en el banco indicó que sólo se recaudó cerca de 42 mil dólares y “el costo mensual es de 500 dólares”
El fideicomiso transita por una ruta sin destino y hacia el cierre porque hoy genera más pérdidas que soluciones para la entidad del Parque de la Independencia. La cifra depositada a la fecha asciende a los 41.800 dólares, que no es un remedio para la economía del club y, a la vez, genera un gasto mensual de cerca de “quinientos dólares”. Encima, la imposibilidad por el cepo de adquirir la moneda extranjera también incide a que no haya movimientos en la cuenta que se abrió con el fin de ayudar a Newell’s y es por eso que “desde septiembre que no hay movimientos de depósitos”, le confió a Ovación una fuente consultada al respecto.
La idea del fideicomiso no era para nada desatinada en un momento de necesidades urgentes de dinero que transitó la entidad. De ahí nació esta posibilidad que tuvo más de cien días para que se pusiera en movimiento —su constitución costó alrededor de 97 mil pesos—. Claro que se esperaba y se decía en su momento que la expectativa era recibir un apoyo importante de socios, amantes de los colores de la Lepra y, sobre todo, empresarios y acumular alrededor de dos millones de dólares. Nada de eso sucedió y la cifra es ínfima con respecto a las expectativas iniciales. Y no aparecieron los montos valiosos como se aguardaba.
En el medio de todo esto favoreció a la dirigencia leprosa que aparecieran ingresos por las ventas de Lisandro Martínez, Ezequiel Ponce y Enzo Barrenechea y por eso no necesito de manera urgente el apoyo económico del fideicomiso, que con el paso del tiempo quedó de lado hasta llegar a esta situación donde se piensa con firmeza la posibilidad de cerrarla para no seguir generando gastos. Además, el dinero depositado hasta el momento debe ser devuelto a sus aportantes tal como se estableció en el mismo, aunque el plazo límite para hacerlo es en diciembre de 2021.
Por suerte para la entidad al final esta idea no fue la solución a los diversos problemas que afrontó tiempo atrás y que motivaron a que se pensara en el fideicomiso como una manera de ayudar. Y en su momento pareció ser el único recurso que había a mano para una rápida salida, más allá de que no fue tan así porque su constitución llevó alrededor de tres meses. Pero la realidad indica que no funcionó.
¿Qué paso se debería dar para ponerle punto final? “Los que lo constituyeron y, a la vez, aportaron son los que tienen que realizar el trámite para cerrarlo”, le confió a este diario una voz autorizada en este tema.
Fuente-ovacion01